La vida en Marcolin se basa en relaciones, apertura y responsabilidad compartida. Esto es lo que convierte la colaboración en una forma de belleza cotidiana.
En Marcolin creemos que la visión nace del diálogo y que la inclusión es un acto concreto, no un concepto abstracto. Por ello, fomentamos un entorno positivo, participativo y flexible donde las personas puedan expresarse y sentirse parte de una comunidad global.
Cada día nos esforzamos por hacer que el trabajo sea sostenible, promoviendo el equilibrio entre la vida y la profesión, el bienestar, la salud y la seguridad. Desde el servicio de Recursos Humanos, hasta el apoyo psicológico, y desde actividades de trabajo en equipo hasta voluntariado, ponemos el bienestar colectivo en el centro.
Para nosotros, la inclusión es un diálogo diario, una manera de mirar más lejos.
En Marcolin, mirar al trabajo siempre significa mirar a las personas.