En los últimos años se han llevado a cabo importantes intervenciones en nuestras plantas de producción en Italia: desde la sustitución de más de 1.800 lámparas de neón por sistemas LED, hasta la gestión remota de compresores e instalaciones, pasando por la regulación automática de la temperatura en los espacios de trabajo.
A estas acciones se suman iniciativas más puntuales, como la renovación de cubiertas para mejorar el aislamiento térmico o la sustitución de calderas por modelos más eficientes.
Para medir los avances, se ha introducido un indicador energético (KPI) por unidad de producto terminado, que pasó de 1,95 kWh en 2021 a 1,52 kWh en 2024.
Un resultado que refleja la eficacia de las intervenciones y la creciente atención al rendimiento ambiental.
En el ámbito del embalaje, está en marcha un proyecto de personalización de las dimensiones de los paquetes, que permitirá reducir tanto el volumen de cartón utilizado como el material de relleno, gracias también a sistemas automatizados internos.
El proyecto Data System, ya activo para la cartografía de accesorios y embalajes, se ampliará en 2025 también a las gafas, con el objetivo de perfeccionar la trazabilidad de los materiales y orientar acciones cada vez más específicas hacia la reducción de impactos.